Pasaba una época difícil, el trabajo, la familia, la pareja… Yo no existía. Por casualidad una amiga me pasó un webcasting gratuito que impartía Silvia. Me encantó. Vi una luz y contacté con ella. Hicimos una primera sesión gratuita y enseguida vi que me podía ayudar.
Silvia me dio confianza, me entendió y empatizó conmigo. Después de unas semanas de «deberes» me ha dado las herramientas para empezar mi nueva «yo».
Solo puedo dar las gracias por sus consejos y animo a todas las mujeres desbordadas que contacten con ella. Solo con la primera sesión verán que Silvia ama su trabajo y ayudar a mujeres mamipulpo, como dice ella.